La estructura de la sociedad Peruana está tejida con hilos de cultura, minuciosamente entretejidos con hilos del catolicismo. Es la religión la que provee textura a las vibrantes tradiciones de Perú. Estos íconos de fe capturan las esperanzas de muchos peruanos buscando intervención divina para cumplir sus sueños, y muchas veces, para aliviar su sufrimiento. Ser un Ícono es escuchar esos sueños, oír muchas promesas, ser visitado y llevado en andas sobre las espaldas de devotos que tratan de abrirse paso a través de fieles y curiosos reacios de apartarse de la procesión. Perú es también un lugar donde la religión forma parte de la vida diaria. Cada negocio y cada oficina tiene un santo patrón representado por un ícono, inclusive las oficinas del gobierno. Estos íconos siempre presentes cruzan los incontables hilos multicolores de las tradiciones culturales antiguas y modernas para formar un tejido de múltiple textura que es Perú.
